2. Conocer las redes sociales
3. Aplicar el sentido común y la prudencia
4. Leer y respetar las condiciones del servicio
5. Configurar las opciones de privacidad de datos personales
6. Escoger bien a quienes se acepta como amigos
7. Evitar las conductas de riesgo
8. Negociar el tiempo de conexión
9. Hablar y aprender con los hijos y con los alumnos
10. Establezca su propio decálogo
Está muy bien pensado, y lo mejor es que nos invita a construir nuestros propios decálogos. Creo que ahí está lo más interesante ya que cada punto es discutible, como en todo este tipo de decálogos, pero los puntos 2, 9 y 10 están directamente relacionados a la ideas que algunas vez comentamos sobre "aprender a aprehender" la web 2.0 por ejemplo (en un taller en el Consudec en año pasado).
Aprender permanentemente también sobre redes sociales podría ser una buena forma de meterse en este mundo tan cambiante, con tantas fluctuaciones y constante evolución. Hay que aprehender, dominar, controlar, no hay otra forma de crecer si no es conociendo, experimentando sin temor a equivocarse. Nosotros en el medio, somos nosotros mismos en el medio y no otros. Nuestro yo real, nuestra personalidad, nuestro sistema de vida real o constelación como quiera llamársele, cada vez más va a estar en el medio digital. Si no aceptamos eso la estamos pifiando. Que no suene soberbio: El mundo virtual, es real. Lo que hacemos en el mundo virtual, tiene que ver, o tendrá que ver cada vez más con nuestra vida real. He ahí el éxito de las redes sociales, se trata de redes globales pero el impacto más poderoso es el local. Es lindo interactuar con gente de otros países y nos encanta aprender de otras culturas, pero lo que llega realmente e impacta en nuestras vidas es cuando estas redes nos conectan a personas cercanas, con quienes nos conocemos, con nuestros amigos o conocidos. Iris puso un ejemplo bien concreto. No por nada me preguntaron hace poco para Crítica digital, sobre el levante, el sexo, el amor en facebook. La gente interactúa en facebook como una extensión del mundo real, no como un juego para pasar el rato, sino como una forma más de comunicarse con el mundo.
Cada vez más la omnipresencia o la ubicuidad de los medios sociales tiene anclajes en la vida cotidiana. Y los jóvenes, desde el que busca comprarse un auto, estudiar, comprarse un perro, tener sexo, hacer amigos o trabajar.. todos y para cualquier cosa que quieran hacer en algún momento, piensan como alternativa la red. Y hoy la red, es cada vez más social. Luego, o aprendemos sobre redes sociales y nuevos medios o un buen día nos enteramos de que el mundo está pensando e interactuando en y con nuevos medios ,y nosotros seguimos leyendo el diario, llamando por teléfono y mirando televisión.
Si estas palabras te suenan del siglo pasado, quiere decir que no necesitabas leerlas. Si te parecen novedosas, empezá por el punto 2 del decálogo de Orihuela.