Un día como hoy
El 20 de junio de 1820 moría en Buenos Aires Manuel Belgrano en la pobreza extrema, asolado por la guerra civil.
Además de ser el creador de la bandera, Belgrano fue uno de los más notables economistas argentinos, precursor del periodismo nacional, impulsor de la educación popular, la industria nacional y la justicia social, entre otras muchas cosas.
Para el historiador Felipe Pigna, Belgrano es un héroe olvidado: "La historia otra ha condenado a Manuel Belgrano a no ser. Belgrano no tiene día en el calendario oficial. El día de su muerte es el Día de la Bandera. No nos han enseñado con ejemplos a querer a nuestra Bandera, ha sido violada y usurpada por los gobiernos genocidas que han hecho abuso de su uso. Hay que recuperarla para nosotros, y ésa es una tarea imprescindible pero larga. Mientras tanto, Belgrano sigue sin ser recordado como se merece".
Promotor de la Educación
Como Secretario del Consulado consideró que lo más importante era fomentar la educación, es decir, capacitar a la gente para que aprendiera oficios y pudiera aplicarlos en beneficio del país. Por eso, ayudó al desarrollo de la Escuela de Dibujo y de la Escuela de Náutica, ambas, creadas en 1799.
Belgrano hizo también otros aportes en la educación: en esa época no había escuelas para chicas; él quería crearlas porque pensaba que para ser buenas madres las mujeres debían educarse. Según sus palabras, "se deben poner escuelas gratuitas para las niñas, donde se les enseñará la doctrina cristiana, a leer, a escribir, coser, bordar, etc., y principalmente inspirarles amor al trabajo, para separarlas de la ociosidad, tan perjudicial o más en las mujeres que en los hombres".
Además, quería que la educación fuera gratuita para todos.
Según Mitre, "Belgrano aconsejaba que se abran escuelas en todos los barrios de la ciudad y en todas las villas de campaña para los niños de ambos sexos, en circunstancias en que no existía en Buenos Aires más que una sola escuela de primeras letras, que se llamaba ‘desrey’, por ser la única que costeaba la Corona de España".
Belgrano desconfiaba de la riqueza fácil que prometía la ganadería porque daba trabajo a muy poca gente, no desarrollaba la inventiva, desalentaba el crecimiento de la población y concentraba la riqueza en pocas manos. Su obsesión era el fomento de la agricultura y la industria.
Las ideas innovadoras de Belgrano encontraron la firme oposición de los miembros del Consulado, quienes eran a su juicio “todos comerciantes españoles, exceptuando uno que otro, que nada sabían más que su comercio monopolista, a saber: comprar por cuatro para vender con toda seguridad a ocho”.
¿Dónde estudió Belgrano?
Belgrano se había formado en el Colegio de San Carlos y luego en las Universidades de Salamanca y Valladolid, en España. En 1794, asumió como primer secretario del recientemente creado Consulado, desde donde se propuso fomentar la educación. Creó Escuelas de Dibujo, de Matemáticas y Náutica. Se incorporó a las milicias criollas para defender la ciudad durante las invasiones inglesas y fue uno de los más fervorosos defensores de la causa patriota durante la Revolución de Mayo.
Además de crear la bandera
Fue vocal de la Primera Junta de Gobierno, encabezó la expedición al Paraguay, durante la cual creó la bandera, el 27 de febrero de 1812. En el Norte encabezó el heroico éxodo del pueblo jujeño y logró las grandes victorias de Tucumán, Salta y Las Piedras. Luego vendrían las derrotas de Vilcapugio y Ayohuma y su retiro del ejército del Norte. En 1816 participó activamente en el Congreso de Tucumán. Sus incansables preocupaciones abarcaron desde la enseñanza estatal gratuita y obligatoria, hasta la reforma agraria.
Infatigable ante los obstáculos encontrados a su paso diría:
“Mi ánimo se abatió, y conocí que nada se haría a favor de las provincias por unos hombres que por sus intereses particulares posponían el bien común. Sin embargo, (…) me propuse echar las semillas que algún día fuesen capaces de dar frutos”.
Belgrano en Santa Fe
El prócer llegó a Santa Fe el 1 de octubre de 1810 y estuvo durante casi una semana en el convento de Santo Domingo. La Primera Junta le encargó transmitir el mensaje de la Revolución de Mayo.
El 20 de junio de 1820 moría en Buenos Aires Manuel Belgrano en la pobreza extrema, asolado por la guerra civil.
Además de ser el creador de la bandera, Belgrano fue uno de los más notables economistas argentinos, precursor del periodismo nacional, impulsor de la educación popular, la industria nacional y la justicia social, entre otras muchas cosas.
Para el historiador Felipe Pigna, Belgrano es un héroe olvidado: "La historia otra ha condenado a Manuel Belgrano a no ser. Belgrano no tiene día en el calendario oficial. El día de su muerte es el Día de la Bandera. No nos han enseñado con ejemplos a querer a nuestra Bandera, ha sido violada y usurpada por los gobiernos genocidas que han hecho abuso de su uso. Hay que recuperarla para nosotros, y ésa es una tarea imprescindible pero larga. Mientras tanto, Belgrano sigue sin ser recordado como se merece".
Promotor de la Educación
Como Secretario del Consulado consideró que lo más importante era fomentar la educación, es decir, capacitar a la gente para que aprendiera oficios y pudiera aplicarlos en beneficio del país. Por eso, ayudó al desarrollo de la Escuela de Dibujo y de la Escuela de Náutica, ambas, creadas en 1799.
Belgrano hizo también otros aportes en la educación: en esa época no había escuelas para chicas; él quería crearlas porque pensaba que para ser buenas madres las mujeres debían educarse. Según sus palabras, "se deben poner escuelas gratuitas para las niñas, donde se les enseñará la doctrina cristiana, a leer, a escribir, coser, bordar, etc., y principalmente inspirarles amor al trabajo, para separarlas de la ociosidad, tan perjudicial o más en las mujeres que en los hombres".
Además, quería que la educación fuera gratuita para todos.
Según Mitre, "Belgrano aconsejaba que se abran escuelas en todos los barrios de la ciudad y en todas las villas de campaña para los niños de ambos sexos, en circunstancias en que no existía en Buenos Aires más que una sola escuela de primeras letras, que se llamaba ‘desrey’, por ser la única que costeaba la Corona de España".
Belgrano desconfiaba de la riqueza fácil que prometía la ganadería porque daba trabajo a muy poca gente, no desarrollaba la inventiva, desalentaba el crecimiento de la población y concentraba la riqueza en pocas manos. Su obsesión era el fomento de la agricultura y la industria.
Las ideas innovadoras de Belgrano encontraron la firme oposición de los miembros del Consulado, quienes eran a su juicio “todos comerciantes españoles, exceptuando uno que otro, que nada sabían más que su comercio monopolista, a saber: comprar por cuatro para vender con toda seguridad a ocho”.
¿Dónde estudió Belgrano?
Belgrano se había formado en el Colegio de San Carlos y luego en las Universidades de Salamanca y Valladolid, en España. En 1794, asumió como primer secretario del recientemente creado Consulado, desde donde se propuso fomentar la educación. Creó Escuelas de Dibujo, de Matemáticas y Náutica. Se incorporó a las milicias criollas para defender la ciudad durante las invasiones inglesas y fue uno de los más fervorosos defensores de la causa patriota durante la Revolución de Mayo.
Además de crear la bandera
Fue vocal de la Primera Junta de Gobierno, encabezó la expedición al Paraguay, durante la cual creó la bandera, el 27 de febrero de 1812. En el Norte encabezó el heroico éxodo del pueblo jujeño y logró las grandes victorias de Tucumán, Salta y Las Piedras. Luego vendrían las derrotas de Vilcapugio y Ayohuma y su retiro del ejército del Norte. En 1816 participó activamente en el Congreso de Tucumán. Sus incansables preocupaciones abarcaron desde la enseñanza estatal gratuita y obligatoria, hasta la reforma agraria.
Infatigable ante los obstáculos encontrados a su paso diría:
“Mi ánimo se abatió, y conocí que nada se haría a favor de las provincias por unos hombres que por sus intereses particulares posponían el bien común. Sin embargo, (…) me propuse echar las semillas que algún día fuesen capaces de dar frutos”.
Belgrano en Santa Fe
El prócer llegó a Santa Fe el 1 de octubre de 1810 y estuvo durante casi una semana en el convento de Santo Domingo. La Primera Junta le encargó transmitir el mensaje de la Revolución de Mayo.
El creador de la enseña patria estuvo en la ciudad "alrededor de una semana y durante su permanencia todos los días concurrió a la misa en la iglesia que aún permanece ubicada en la esquina de 9 de Julio y 3 de Febrero". "Belgrano conversaba a diario con los padres domínicos, orden por la cual sentía una especial predilección. Incluso hay algunos historiadores que aseguran que cuando murió tenía sobre sus ropas los hábitos de esa hermandad eclesiástica". (Nota completa: Belgrano en la ciudad cordial- por Soledad Mizerniuk para Diario UNO)
Bibliografía
- Adaptación para El Historiador del libro de Felipe Pigna Los Mitos de la Historia Argentina, Buenos Aires, Norma. 2004. Fuente: www.elhistoriador.com.ar
- Bibliografía oficial de Belgrano: http://www.me.gov.ar/efeme/3dejunio/educador.html
- http://www.elhistoriador.com.ar/articulos/actualidadpensamiento.php
- Foto: Retrato de Belgrano por Eduardo Cerutti, reproducido en la revista El Sol. Archivo General de la Nación, Departamento de documentos fotográficos, República Argentina.
Bibliografía
- Adaptación para El Historiador del libro de Felipe Pigna Los Mitos de la Historia Argentina, Buenos Aires, Norma. 2004. Fuente: www.elhistoriador.com.ar
- Bibliografía oficial de Belgrano: http://www.me.gov.ar/efeme/3dejunio/educador.html
- http://www.elhistoriador.com.ar/articulos/actualidadpensamiento.php
- Foto: Retrato de Belgrano por Eduardo Cerutti, reproducido en la revista El Sol. Archivo General de la Nación, Departamento de documentos fotográficos, República Argentina.